Brillante debut literario del periodista onubense Rafael Adamuz, en el que
rescata del olvido al grupo de hombres, en su mayoría mineros procedentes de
Riotinto, ejecutados al comienzo de la Guerra Civil tras los sucesos de La
Pañoleta. El 19 de julio de 1936 parten desde la localidad minera en con la
misión de liberar Sevilla del golpe militar contra la República. En el citado
barrio de Camas les espera la desagradable sorpresa de que Haro Lumbreras, que
comandaba a los guardias civiles que debían escoltarles, les ha vendido. Los
camiones en los que venían son atacados y los supervivientes apresados y
encerrados en el barco Cabo Carvoeiro, que atracado en el Guadalquivir se
convierte en su cárcel.
A lo largo de estas páginas, someramente noveladas, salpicadas de
documentación, asistimos al remedo de proceso en el que los 69 protagonistas
del relato son juzgados por un Tribunal Militar. Nos sentimos testigos de la odisea
olvidada de unos hombres a los que se ha querido borrar de la Historia,
penetramos en su sufrimiento cotidiano en la mina, explotados y espiados por
los patronos ingleses. A través de sus declaraciones al tribunal contemplamos
su precipitado reclutamiento y sufrimos con ellos las condiciones infrahumanas
de su reclusión. Los acompañamos hasta el final de un juicio amañado, una farsa
con una resolución sorprendente, tramposa y trágica que nos hace reflexionar
sobre la necesidad de reivindicar la figura de aquellos que fueron víctimas de
la crueldad y el despropósito. Devolverlos al olvido sería condenarlos de
nuevo.