domingo, 29 de julio de 2012

AIRE DE DYLAN de ENRIQUE VILA-MATAS


A través de la relación entre Vilnius Lancastre, un joven cineasta dedicado a un absurdo proyecto sobre la Historia General del Fracaso, y su difunto padre, alcohólico y escritor reconocido, Vila-Matas presenta el conflicto entre una vieja generación criada en la cultura del esfuerzo y otra nueva que perfecciona el arte de no hacer nada, consciente de la inutilidad de sus actos.
Porque si, por un lado, “el hombre, ser levísimo, es soñado por una figura incierta, y el estado del mundo indica que, más que la creación de un ser superior, somos el pasatiempo de un ser cargado de defectos”, y, por otro, “el drama de la sociedad moderna, su trágica inconsistencia y avance hacia el vacío, es ya un secreto a voces y un hecho brutal, al que nadie parece capaz de poner remedio”, ¿merece la pena el esfuerzo si este está condenado al fracaso? ¿Aportan algo el arte o el pensamiento sabiendo que la cultura camina hacia el abismo? ¿Tiene el verdadero artista otra opción que el mutismo?
Aire de Dylan es una divertida crítica al postmodernismo y un ácido retrato del vacío cultural por el que nuestra sociedad se despeña, indiferente, sin aparente remedio.

jueves, 26 de julio de 2012

LA CARRETERA de CORMAC McCARTHY


El autor de No es país para viejos obtuvo el premio Pulitzer en 2007 por La Carretera, retrato desolador de un mundo postapocalíptico, en el que un padre y su hijo luchan por una supervivencia cuyo único premio es el de seguir vivos un día más en un despoblado paisaje cubierto de cenizas.
Mucho más allá de ser una novela apocalíptica, La Carretera es una novela angustiosamente bella, una reflexión profunda sobre la existencia y su sentido.

domingo, 22 de julio de 2012

NO LLAMES A CASA de CARLOS ZANÓN


Bruno ha descubierto el negocio que lo sacará de la miseria. Junto con su novia Raquel y el hermanastro de ésta, Cristian, se dedica a seguir a las parejas de amantes a las casas de citas para chantajearlos amenazándolos con destrozar sus tranquilas vidas matrimoniales.
No llames a casa no es solo una trepidante novela negra con la Barcelona de 2012 y la crisis como telón de fondo, sino que trasciende el género para convertirse en un magnífico retrato de nuestra sociedad enferma, en especial del lumpen y de una clase media que se aferra a la estabilidad para no caer en la escala social en estos tiempos difíciles. Un reflejo de nuestros tiempos envuelto en una historia de traición, engaños y deslealtades.

jueves, 19 de julio de 2012

LA CONJURA DE LOS NECIOS de JOHN KENNEDY TOOLE


Esta novela representó el debut literario póstumo de su autor, John Kennedy Toole, que se suicidó sin ver publicada su obra tras reiteradas negativas de las editoriales. Una  divertida aventura (desventura) que narra las andanzas del antihéroe Ignatius Reilly, un solterón obeso de 30 años, que vive con su madre alcohólica, dedicado a escribir una diatriba contra la sociedad del siglo XX abogando por un regreso al estilo de vida del Medievo; pero que se verá obligado a formar parte de esa sociedad de la que reniega al tener que trabajar a resultas de una “conjura” perpetrada por su madre y otros personajes de peculiar pelaje.
La conjura de los necios es una novela divertida y cargada de ironía, una narración llena de sentido del humor y sátira. 

domingo, 15 de julio de 2012

LA MAGNITUD DEL DESASTRE de ORIOL LLOPIS


Mucho antes de la era digital y de internet, antes que el virus de la radio-fórmula infectara las ondas hasta el tuétano (sálvese Radio 3), antes que la música en televisión degenerara en karaoke para el lucimiento de imitadores de imitadores de Ricky Martin, hubo un tiempo en que los jóvenes quedábamos las mañanas de los sábados para ir a las hoy extintas tiendas de discos con la avidez del que visita museos cuando ejerce de turista. Una era en la que nuestra colección de discos era nuestra seña de identidad, en la que enfundarse los mejores vaqueros y la mejor chupa era sinónimo de concierto. Un tiempo de sexo – menos del que hubiéramos querido -, drogas – más de las que hubiéramos debido – y rock & roll – en su justa (des)medida –. Años de ruptura de los que el crítico musical Oriol Llopis fue testigo aventajado y directo.
La magnitud del desastre, su libro de memorias contadas en escrupuloso desorden cronológico (¿acaso los recuerdos se archivan de otra forma?), nos devuelve aquellos tiempos que, no nos engañemos, ya nunca volverán. Y no lo hace desde la Verdad (desconfía de aquellos que te digan que existe y la conocen), sino desde la sinceridad más absoluta (por el contrario, confía en aquel que reconoce sus flaquezas).
Llopis se aleja en sus memorias del tono de auto-homenaje al que son tan proclives algunas viejas glorias de nuestro rock patrio, devenidas en folklóricas poperas; y nos narra sus experiencias desde la frescura y la desvergüenza propias del rockero de raza, ese que no se vendió por dinero ni por un asiento de jurado en la enésima versión de OT, devolviéndonos con humor los aromas de una generación que no llegó a cambiar el mundo, pero que al menos, por unos años, cambió el triste panorama musical de nuestro país.

jueves, 12 de julio de 2012

TOKIO BLUES (NORWEGIAN WOOD) de HARUKI MURAKAMI


Retrato del Japón de los años sesenta, cuya juventud empieza a occidentalizarse a través de la música y la cultura anglosajona. Watanabe, un joven adolescente japonés enamorado del rock y aprendiz en el arte de vivir, se mueve entre dos mujeres. Naoko, la representación del Tánatos, el impulso de autodestrucción que se esconde en todos nosotros y Midori, que encarna al Eros, la alegría dionisíaca de vivir y el descubrimiento de la sexualidad.

domingo, 8 de julio de 2012

EL JOVEN VENDEDOR Y EL ESTILO DE VIDA FLUIDO de FERNANDO SAN BASILIO


El centro comercial de La Vaguada en Madrid, ejemplo arquitectónico del templo de comienzos del siglo XXI en el que se rinde culto al nuevo dios: el Producto, es un microcosmos representativo de nuestra realidad global, un espacio en el que se reúne la nueva identidad cultural de nuestro mundo diverso gracias a las marcas. Así mismo, la historia de Israel es la del hombre moderno, ese que conduce su vida siguiendo las enseñanzas de un libro de autoayuda o de un programa radiofónico dedicado al análisis metódico de la felicidad.
El humor, el sarcasmo y la ironía se asoman en cada frase de este homenaje de San Basilio al Ulises de Joyce.

jueves, 5 de julio de 2012

1984 de GEORGE ORWELL


Orwell tomó como modelo la despiadada dictadura de Stalin para construir esta novela futurista en la que el Estado, representado en la figura del gran dictador “El Gran Hermano” (a Stalin le llamaban en la URSS “El Padrecito”) cambia acontecimientos históricos dependiendo de sus intereses bélico-políticos. Los individuos son colectivamente aleccionados, al tiempo que se les somete a un férreo control tanto de su comportamiento social, como individual. Y ¡ay! de aquel que se revele, pues será devuelto al redil con un plan personalizado, para ser finalmente ejecutado.
Un relato inquietante y lúcido, que a buen seguro todavía hoy día no resulta tan ficticio en algunos lugares del planeta, como Corea del Norte, China, Siria, Irán, Cuba, y un largo etcétera. ¿O acaso hemos de mirar más cerca?

domingo, 1 de julio de 2012

VERANO de J.M. COETZEE


Tras Infancia y Juventud, el nobel sudafricano prosigue con sus “memorias” en Verano, novela en la que se cuenta la etapa que comprende entre 1972 y 1975, con John Coetzee de regreso a Sudáfrica durante un periodo fundamental para la historia del país. El relato se desgrana de forma premeditadamente desapasionada y fría, mediante un experimento narrativo que subraya el distanciamiento de lo que se cuenta. Un joven biógrafo de nacionalidad británica prepara un libro sobre el escritor John Coetzee, una vez fallecido. Para ello se entrevista con algunas personas que lo conocieron. Cuatro mujeres con las que ha mantenido algún tipo de relación sentimental (si es que esa palabra cabe en el universo del personaje Coetzee) y un profesor de literatura del que fue compañero. A esto se suman notas del propio autor con las que se abre y se cierra la novela.
Con una marcada influencia de Samuel Beckett (y una más sutil de Roberto Bolaño), Verano plantea al lector el tema de una inevitable incomunicación como fuente de conflictos (personales, familiares, sentimentales, políticos…) y la imposibilidad de que los personajes cambien su destino (sustantivo éste que Coetzee convierte en sinónimo de fatalidad).